Pan Diario
Cita del Día
02 de septiembre 2025
Isaías 43:19 (AMPC)
“¡He aquí, yo hago algo nuevo! Ahora brota; ¿no lo perciben y lo reconocen, y no prestarán atención a ello? Aun en el desierto abriré camino, y ríos en la soledad.”
Una Entrada Ha Sido Ministrada A Vosotros A Traves De La Puerta Del Oriente - Hermano Kevin Blewett, 20-08-2025
Así que, hay un Camino. Este es el Camino. [Ed: El hermano Blewett señala el Séptimo Sello en la pantalla.] No hay otro camino. ¿Cómo podemos decirlo lo suficientemente fuerte? ¿Cómo podemos gritarlo? ¿Cómo podemos lograr que lo entiendan? Solo hay un Camino. Dios solo tiene un Camino provisto de regreso al Edén. Es a través de la Puerta del Oriente. Y este extremo del Pequeño Edificio está justamente contra la Puerta del Oriente.
¿Cómo lo sé? Así es como lo sé: Los Siete Sellos son Sellos de Redención. Redención es volver al Edén. Nada menos que el Edén. El Séptimo Sello es para lograr eso. Este es el Séptimo Sello. Así que, el mismo final del Séptimo Sello debe estar justo al lado de la Puerta del Oriente.
Así es como lo sé. No se puede quebrantar eso. El Séptimo Sello nos regresa al Edén. Su Esposa se ha preparado para casarse con el Esposo. De regreso al Edén, juntos, para la Ceremonia Nupcial, las Bodas del Cordero.
Así que, solo hay un Camino: a través de la Visión de la Carpa. A través del Séptimo Sello. Y David escribió: “Su camino es por el mar. Su senda es por el mar.” Dios tiene una senda. Cuando el Ángel desciende a la tierra, el Ángel del Pacto del Arco Iris, Él tiene un Camino trazado. Y el Espíritu Santo puede llenar a ancianos locales, pastores. Dios bendiga a esos siervos, llenos del Espíritu. Ellos exhortan. Ellos animan. Pero el Ángel tiene una dirección. Esa es la Senda. Esa es la Senda aquí. [Ed: El hermano Blewett señala la ilustración del Séptimo Sello en la pantalla.] No hay otra Senda. La única Ruta que Él tomará es que permanezcamos con el Ángel. Seguir a Cristo.
Y yo les dije: síganme a mí, en tanto yo sigo al Ángel, a Cristo. Y ustedes lo hicieron. ¡Aleluya! Dios los bendiga. Gracias por su confianza. Ustedes creen que estoy siguiendo al Ángel. Y la Escritura escrita a mano lo vindicó. ¡Amén! Vindicado por la Escritura escrita a mano.